Por José E. Bordón.
SANTA FE.- Todas las transacciones con inmuebles rurales que se efectúen en este territorio a partir del jueves próximo (1° de septiembre) se regirán con el denominado Valor Interno de Referencia (VIR), por lo que será un dato obligatorio a relevar por los escribanos que intervengan en este tipo de operaciones. Sobre esa base se aplicará el impuesto de Sellos, explicó el subsecretario de Ingresos Públicos, Sergio Beccari.
El VIR se calcula de acuerdo con una fórmula polinómica en la que se tienen en cuenta el valor fiscal de la propiedad, el valor real de mercado, las mejoras realizadas en el inmueble, el valor y las características del suelo según la región, entre otros elementos. Con la elaboración de este valor, el Gobierno pretende corregir las distorsiones -sin modificar la ley- que existen entre el precio real de las propiedades rurales, y los valores fiscales.
Desde la fecha citada, los escribanos que actúan como agentes de información de la Administración Provincial de Impuestos (API) están obligados a solicitar a Catastro el VIR de la propiedad de la que será objeto la operación en la que intervienen.
«El escribano pedirá el VIR de esa propiedad, y si el valor de la escritura que se pactó entre las partes interesadas (comprador y vendedor) es por debajo de ese valor de referencia, el profesional está obligado a informar a la API. A partir de allí, la API activa una serie de operativos de fiscalización a los sujetos intervinientes en la transacción para determinar por qué la operación se hizo por un valor menor. Ello puede derivar en sanciones, también para el escribano que es solidariamente responsable. Las sanciones -precisó- son multas por defraudación de hasta tres veces el valor no ingresado», apuntó el funcionario.
Además, la aplicación del VIR redundará en un incremento de la recaudación de Sellos, que crecería un 20%, aproximadamente. «No aumenta Sellos porque no cambia la alícuota. Lo que sucede es que, como se amplía la base imponible, el fisco aumenta lo que recauda por ese concepto», precisó Beccari.
Fuente: La Nación, Suplemento Campo, 27 de agosto.
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